En Chile y el mundo actual, el agua representa un recurso clave para el desarrollo. La escasez hídrica en Chile que preocupa hoy a la sociedad no ha dejado indiferente a la industria minera, la cual ha hecho grandes esfuerzos por continuar operando bajo dicha contingencia. Al ser el agua un insumo crítico en el proceso productivo minero, cobra relevancia contar con la mayor cantidad de plantas desaladoras que cubran esta necesidad.

Sabemos que los esfuerzos que realizan las mineras en materia de desalinización es una estrategia muy significativa para garantizar su suministro hídrico como medida ante el cambio climático, por lo tanto, podemos señalar que con este desarrollo el consumo de agua de mar en la minería casi se triplicará al 2033 y eso representará el 71% del total del consumo. Esto es muy importante, dado los cambios productivos y de ley mineral que harán que aumente la demanda de recursos hídricos en la actividad minera en alrededor de un 22% a este año.   

Por otra parte, según el informe Proyección del Consumo de Agua en la Minería del Cobre 2019-2030, desarrollado por Cochilco, al 2030 el consumo de agua de mar aumentará en un 156% respecto a 2019, llegando a 11 m3 por segundo; mientras que el uso de agua continental disminuiría en un 6%.  “En las regiones más afectadas por la sequía, la desalinización se posiciona como la solución más concreta: en Antofagasta, el agua de mar representará el 65% del agua utilizada para la minería del cobre hacia 2030; en Tarapacá, el 60%; en Atacama, el 42%; y en Coquimbo, el 25%”, señaló Camila Montes, analista de la entidad.

En esta línea, en DRS Ingeniería y Gestión, nos sentimos afortunados de ser parte de uno de estos importantes proyectos para la minería y el país, participando en conjunto con ILF del proyecto Agua Desalinizadora Distrito Norte – Calama, en donde DRS participará activamente en la supervisión de obras con alrededor de 45 profesionales multidisciplinarios, para abarcar el espectro completo de especialidades.